Testículos y sus trastornos

Trastornos Testiculares

Los testículos producen las células reproductoras masculinas y las hormonas masculinas, incluyendo la testosterona. 

¿Qué son los testículos?

Los testículos son parte del sistema reproductivo masculino. Los testículos son dos órganos ovalados del tamaño de aceitunas grandes. Están localizados dentro del escroto, el saco suelto de piel que cuelga detrás del pene. Los testículos producen las hormonas masculinas, incluyendo la testosterona, y producen esperma, las células reproductivas masculinas. Los trastornos de los testículos pueden llevar a complicaciones graves, incluyendo desequilibrios hormonales, disfunción sexual e infertilidad.

Testículos y sus trastornos

¿Qué trastornos afectan a los testículos?

Algunos de los trastornos más comunes que afectan a los testículos incluyen los siguientes:

Traumatismo testicular

Debido a que los testículos están localizados dentro del escroto, que cuelga fuera del cuerpo, no tienen la protección de los músculos y huesos. Esto hace que sea más fácil que los testículos sean golpeados, pateados o aplastados, lo cual ocurre con más frecuencia durante los deportes de contacto. Los hombres pueden proteger sus testículos usando copas atléticas durante los deportes.

El traumatismo en los testículos puede causar dolor severo, moretones y/o hinchazón. En la mayoría de los casos, los testículos, que están hechos de un material esponjoso, pueden absorber el choque de una lesión sin causar daños graves. Un tipo raro de traumatismo testicular, llamado ruptura testicular, ocurre cuando el testículo recibe un golpe directo o es apretado contra la superficie dura de la pelvis. Esta lesión puede hacer que la sangre se filtre al escroto. En casos graves, puede ser necesaria la cirugía para reparar la ruptura y así salvar el testículo.

Torsión testicular

Dentro del escroto, los testículos están asegurados en un extremo por una estructura llamada cordón espermático. Algunas veces, este cordón se tuerce cortando el suministro de sangre del testículo. Los síntomas de la torsión testicular incluyen dolor repentino y severo, agrandamiento del testículo afectado, sensibilidad e hinchazón.

Este trastorno, que ocurre con mayor frecuencia en hombres jóvenes entre los 12 y 18 años de edad, puede ser el resultado de una lesión en los testículos o de una actividad extenuante. También puede ocurrir sin razón aparente.

La torsión testicular es una emergencia. El tratamiento generalmente implica la corrección del problema a través de la cirugía. La función testicular se puede salvar si la afección se diagnostica y se corrige inmediatamente. Si el suministro de sangre al testículo se interrumpe durante un largo período de tiempo, el testículo puede resultar dañado permanentemente y es posible que sea necesario extirparlo.

Cáncer de testículo

El cáncer testicular ocurre cuando las células anormales en los testículos se dividen y crecen sin control. El cáncer testicular puede desarrollarse en uno o ambos testículos en hombres o niños pequeños.

Los síntomas del cáncer testicular incluyen un bulto, irregularidad o agrandamiento en cualquiera de los testículos; una sensación de tirón o de pesadez inusual en el escroto; un dolor sordo en la ingle o en la parte inferior del abdomen; y dolor o malestar (que puede aparecer y desaparecer) en un testículo o en el escroto.

Se desconocen las causas exactas del cáncer testicular, pero existen ciertos factores de riesgo para la enfermedad. Un factor de riesgo es cualquier cosa que aumenta las probabilidades de que una persona contraiga una enfermedad.

Los factores de riesgo para el cáncer de los testículos incluyen:

Edad – El cáncer testicular puede ocurrir a cualquier edad, pero con mayor frecuencia ocurre en hombres entre los 15 y 40 años de edad.

Testículo no descendido (criptorquidia) – Esta es una condición en la cual los testículos no descienden desde el abdomen, donde están ubicados durante el desarrollo, hasta el escroto poco antes del nacimiento. Esta afección es un factor de riesgo importante para el cáncer testicular.

Antecedentes familiares – Los antecedentes familiares de cáncer testicular aumentan el riesgo.

Raza y etnia – El riesgo de cáncer testicular en hombres caucásicos es más de cinco veces mayor que el de los hombres afroamericanos y más del doble que el de los hombres asiático-americanos.

El cáncer de testículo es una forma rara de cáncer, y es altamente tratable y generalmente curable. La cirugía es el tratamiento más común para el cáncer testicular.

El tratamiento quirúrgico consiste en extirpar el testículo canceroso a través de una incisión (corte) en la ingle. En algunos casos, el médico también puede extirpar algunos de los ganglios linfáticos del abdomen. La radiación, que utiliza rayos de alta energía para atacar el cáncer, y la quimioterapia, que utiliza medicamentos para matar el cáncer, son otras opciones de tratamiento.

El éxito del tratamiento para el cáncer testicular depende de la etapa de la enfermedad cuando se detecta y se trata por primera vez. Si el cáncer se encuentra y se trata antes de que se disemine a los ganglios linfáticos, la tasa de curación es excelente, superior al 98 por ciento. Incluso después de que el cáncer testicular se ha diseminado a los ganglios linfáticos y otras partes del cuerpo, la quimioterapia es altamente efectiva, con una tasa de curación superior al 90 por ciento.

Para prevenir el cáncer testicular, todos los hombres deben estar familiarizados con el tamaño y la sensibilidad de sus testículos, de manera que puedan detectar cualquier cambio. La Sociedad Americana del Cáncer recomienda autoexámenes testiculares (TSE) mensuales para los hombres mayores de 15 años.