Sabes que la menopausia y climacterium no son sinónimos

Menopausia – climacterium

La menopausia y climacterium no son sinónimos, aunque normalmente suele ser difícil distinguirlos. Pero mientras el climacterium es la fase de transición que va desde el periodo reproductivo al no reproductivo, la menopausia comienza justo con la última menstruación.

La menopausia se diagnostica cuando una mujer ha pasado al menos 12 meses sin tener el período. Mientras existan irregularidades, se produzcan algunos síntomas, estamos en el climacterium. Se suelen realizar pruebas como la ecografía transvaginal y la densitometría ósea. Son exámenes complementarios que deben repetirse regularmente.

Durante el climacterium

Durante esta fase empieza a disminuir la producción de hormona drásticamente y empiezan a aparecer los primeros síntomas de la menopausia. Por eso se confunden estas dos etapas. Pueden aparecer los primeros sofocos y cambios de humor, además de una serie de irregularidades en el período menstrual. La menopausia y climacterium van siempre de la mano.

Pueden empezar a aparecer hinchazón en el cuerpo y en los senos, fuertes dolores de cabeza o migrañas, cambios de humor (nerviosismo, irritación, tristeza profunda e incluso depresión) y pueden manifestarse hasta quince días antes de la menstruación. También es común la irregularidad en los ciclos y la variación del flujo menstrual. Estamos en una fase de transición, y es común que las menstruaciones sean más irregulares y discontinuas.

Sabes que la menopausia y climacterium no son sinónimos
La Menopausia

Lo más común es que la menopausia aparezca sobre los 50 años, pero también es totalmente normal que ocurra un poco antes de los 40 años. Como hemos mencionado con la menopausia y climacterium se produce una disminución en la producción de hormonas sexuales femeninas. Esto puede provocar una serie de cambios en cuerpo de la mujer, a corto, a mediano y largo plazo.

Los primeros síntomas son sofocos, cambios de humor, irritación, depresión, mareo, dolor de cabeza y bajos niveles de libido. A medio plazo, además de la disminución del deseo sexual aparece la atrofia urogenital. Se producen un adelgazamiento y secado de la mucosa que recubre la vagina, que produce dolor durante las relaciones sexuales.

Los síntomas más peligrosos se producen a largo plazo. Puede aparecer osteoporosis y enfermedades cardiovasculares. Los estrógenos son hormonas sexuales que además protegen el corazón y los vasos sanguíneos. Como la menopausia y climacterium no tiene una fecha específica, debe estar alerta a sus síntomas y consultar a su ginecólogo regularmente. Teniendo presente que en algunos casos, la fase menopáusica y climacterium se producen de forma asintomática.

Más síntomas

Cambios en la piel. El cabello y las uñas se vuelven más delgados y quebradizos.
Cambios en la distribución de grasa en el cuerpo: el tejido fibroglandular mamario es reemplazado por tejido graso que también se deposita más en la región abdominal.

El tratamiento para la menopausia

El tratamiento más recomendado para aliviar los síntomas de la menopausia es la terapia de reemplazo hormonal. Las hormonas más utilizadas en el tratamiento son la progesterona y el estrógeno. El objetivo es restaurar su nivel en el cuerpo de las mujeres menopáusicas para promover una mejor calidad de vida. Dependiendo del tipo de tratamiento recomendado por su médico, estas hormonas se pueden administrar como geles, parches o pastillas.

Distintos estudios han demostrado que la soja tiene una acción similar al estrógeno en el control de los sofocos. También es importante llevar una alimentación saludable, realizar una actividad física regular, no fumar y evitar del alcohol.

La menopausia y climacterium prematuro

La menopausia y climacterium suele aparecer entre los 45 y 55 años, cuando ocurre antes debemos hablar de menopausia prematura o temprana. Y lamentablemente es algo que suele pasar más a menudo de lo que parece. Muchas mujeres se ven sorprendidas por menstruaciones escasas e irregulares antes de tiempo.

Todos los óvulos que producirá una mujer a lo largo de su vida tienen su origen en células germinales ováricas (o folículos) presentes al nacer. Esta reserva se utiliza desde la primera menstruación (menarquia) hasta la última (menopausia). Ninguna mujer puede formar nuevos folículos para reemplazar los desaparecidos. Cuando el último de ellos muere, los ovarios fallan y las concentraciones de las hormonas femeninas estrógeno y progesterona caen de manera irreversible. Y esto puede darse de forma prematura. También existen otras posibles causas como lógicamente cirugías ginecológicas que incluyan la extirpación de ovarios o el propio estilo de vida, malas dietas e incluso la contaminación ambiental.